El proyecto del Gasoducto del Sur ha crecido torcido, ensombrecido y lleno de dificultades y cuestionamientos al punto de haberse convertido en una piedra más en los zapatos del gobierno. El ex ministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, reconoció que desgraciadamente ha habido una gestión pésima de nuestros recursos. El proyecto del Gasoducto del Sur se inició en el año 2009 cuando apareció la expectativa de encontrar en el lote 58 (Petrobras) una reserva parecida a la del lote 88 de Camisea lo que podía significar en dinero unos 60 mil millones de dólares. La idea en aquel entonces era transportar el gas por un gasoducto a la costa sur peruana favoreciendo a unas 100 mil familias. El proceso sin embargo se fue entrampando poco a poco sino que una empresa debía extraerlo y otra consumirlo. Tres empresas brasileñas estuvieron interesadas como Petrobras, Kuntur en manos de Odebrecht y Braskem habían avanzado bastante en las conversaciones pero para que este proyecto se hiciera realidad se debía comprobar la reserva de gas en el lote 58. Se recuerda que el presidente Ollanta Humala anunció en el 2012 el financiamiento en el que participarán Petroperú y Electroperú. Luego ProInversión realizó una licitación en la que se detectaron una serie de irregularidades donde de los 23 postores, 21 se quejaron del poco tiempo para concursar y les fue imposible llegar a la precalificación, entonces quedaron 2 postores, uno de los cuales cambió la distribución de su participación a último momento rompiendo una de las bases del concurso y siendo descalificado una hora antes de la apertura de los sobres. Finalmente la buena pro se le dio a Odebrecht y Enagas que quedaron solos en el último tramo de la carrera por 7300 millones de dólares casi el doble de la propuesta que asustó al gobierno en un principio. Herrera Descalzi afirmó que la propuesta de 4 mil millones de dólares era justificada y además estaba incluido un poliducto. Se denunció al poco tiempo de otorgada la buena pro que tanto el Presidente de la Comisión Especial de ProInversión, Edgar Ramírez, quien fue convocado sorpresivamente por resolución suprema firmada por el ex Ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, el presidente Ollanta Humala al igual que el propio ministro de Energía y Minas, Eleodoro Mayorga, quienes por separado habían anteriormente asesorado a Odebrecht en relación al Gasoducto del Sur. Se muestran correos electrónicos que confirman conversaciones de Mayorga y Ramírez con Odebrecht. Se muestran correos dirigidos a Eduardo Lima de Rozendo Pinto de Odebrecht. Ramírez informó que fue convocado por el ministro Eleodoro Mayorga. El congresista Víctor Andrés García Belaúnde denunció lobbies por parte de Mayorga al ser consultor de Odebrecht. Ramírez afirmó que la empresa con la que tuvo su última relación de asesoría fue con TGI. La reportera señaló que queda la incógnita de por qué la empresa GDF Suez, la empresa del consorcio descalificado que cambió su participación de 25 a 2% a último momento hizo algo que según las bases de la licitación llevaría a poner en riesgo todo el proyecto del Gasoducto del Sur. Los conductores cuestionan que solo haya un solo postor en las adjudicaciones.